• Juan Madrid (AIG): “En D&O los gastos de defensa tienen una gran incidencia en la siniestralidad siendo una cobertura clave en cualquier póliza de D&O”
• Marc Martínez (ASEFA) destacó la importancia de definir claramente la actividad a la hora de suscribir un seguro de RC en la industria de la construcción

Fundación Inade celebró ayer la última jornada de Espacio Inade del 2023. Esta actividad, que recoge en su Plan de Actuación desde el año 2019, tiene como objetivo ayudar tanto a los productores como a los distribuidores de seguros a cumplir con la gobernanza de los productos de seguros.

En esta ocasión participaron como ponentes Juan Madrid, Financial Lines MLC Leader Spain de AIG, y Marc Martínez, responsable de Grandes Cuentas de la Delegación Nordeste de Asefa. Los temas expuestos fueron, por parte de AIG, el Seguro D&O de las PYMES familiares, y por parte de Asefa, la RC en la industria de la construcción.

Juan Madrid comenzó su exposición hablando sobre la empresa familiar: “Una empresa familiar es aquella en la que la propiedad y/o la dirección de la empresa se encuentra en manos de una familia que tienen vocación de continuidad. En España representan el 89% del tejido empresarial, crean el 67% del empleo y son responsables del 57,1% del PIB del sector privado, según datos del instituto de empresa familiar (https://www.iefamiliar.com/la-empresa-familiar/cifras/)”.

También abordó los principales retos a los que se enfrentan este tipo de empresas, como la transformación digital, la sostenibilidad, la incertidumbre económica, la retención del talento, la globalización, la gestión del patrimonio y el relevo generacional. Sobre este último, Adolfo Campos, director de Fundación Inade y moderador de la reunión, añadió que, en el periodo entre 1972-2008, “el relevo generacional fue la cuarta causa de mortalidad empresarial, provocando el 25% de las quiebras”, según demostró un reciente estudio de la Fundación.

Madrid destacó la importancia de que las pymes familiares tengan contratado un seguro para consejeros/as y directivos/as donde estén aseguradas las decisiones tomadas. “Se debe estudiar bien qué tipo de contrato vamos a firmar, ya que debe proteger tanto a la empresa como a los asegurados, extendiendo estos últimos a los cónyuges, parejas de hecho y herederos”, afirmó.

Por último, destacó que, de la experiencia acumulada en los últimos años, se observa que los gastos de defensa tienen una gran incidencia en la siniestralidad, siendo una cobertura clave en cualquier póliza de D&O, “por ello es importante revisar los contratos, los límites y los sublímites de las sumas aseguradas”.

Resolvió también una duda muy habitual, quién podría reclamar a una empresa familiar, “desde accionistas o empleados, hasta competidores, socios comerciales o la sociedad”, concluyó.

En segundo lugar, Marc Martínez inició su presentación explicando qué es la responsabilidad civil y cómo surge este concepto, para luego centrarse en RC de la industria de la construcción.

“El entorno de la RC de las empresas de construcción se caracteriza por la realización de trabajos fuera de las instalaciones del asegurado, por la especialización de los agentes y por llevar a cabo tareas altamente relacionadas, por la gran diversidad de las relaciones contractuales, y en consecuencia la dificultad de determinar responsabilidades, y por la conflictiva valoración de las causas concretas de los daños”, comentó.

Para centrar mejor el tema, detalló el organigrama de la edificación, y también el marco legal de las empresas de la construcción, que se rigen por el Código Civil, la Ley de Ordenación de la Edificación, de la que surge el Código Técnico de la Edificación, el Baremo de la Ley 35/2015, la Ley de Contrato de seguro y otras normativas específicas.

Sobre las clases de responsabilidad civil que pueden afectar a una empresa de construcción explicó que puede ser directa (por actos propios o de aquellas personas de las que debamos responder), subsidiaria (en defecto del responsable civil directo), mancomunada (cuotas de participación o responsabilidad), o solidaria (todos responden de la totalidad del daño causado).

Marc Martínez destacó también los diferentes riesgos de la construcción y cómo transferirlos a la industria aseguradora: “Los daños personales y los daños a terceros durante la ejecución de la obra se transfieren a través de las garantías de RC de explotación, patronal y cruzada, mientras que una vez finalizada la obra se transfieren a través de la garantía de RC post-trabajos”.

Por último,  quiso dejar claro qué es, desde su punto de vista, lo más importante a la hora de suscribir este tipo de seguros: definir claramente la actividad. Añadió dos tipos de coberturas que considera importantes: los daños a terceros consecuencia de demoliciones manuales o mecánicas que afecten a elementos estructurales, y la garantía de preexistentes, que ampara la responsabilidad civil del asegurado, por daños causados a bienes existentes con carácter previo a la intervención del asegurado.

La jornada finalizó con una ronda de preguntas de los asistentes.

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